El viernes hacia el medio dia llegamos a Sabiñanigo y fuimos recibidos con un intenso calor así que lo primero que hicimos fue ir al hotel a dejar los trastos y a comer para después ir a recoger los dorsales. Como en años anteriores habia un ambientazo cicloturista en polideportivo con stands de productos relacionados con el ciclismo, pero en menor cuantía y calidad que en ediciones anteriores.
El calor iba en aumento por momentos y se empezaba a adivinar cual seria el factor determinante el sábado, el intensísimo calor.
Sábado! Llegó el momento. Nada mas asomarme a la ventana note que la temperatura era elevada para la hora que era, ósea que el sol nos iba a machacar, pero no me iba ha impedir cumplir el objetivo de completar mi 18ª participación en la Quebrantahuesos
Este año el Club Ciclista Routier estuvo presente con una participación menor que el año anterior pero no por ello dejo de estar bien representado. En la salida cada uno se puso en su cajón. Paco con el dorsal rosa, Alfonso y yo con el dorsal naranja, Guille y Joan con el dorsal verde y Kim y Oscar con el dorsal blanco.Pistoletazo de salida y a partir de aquí empieza el peligro y la tensión, primera caída a los 150 metros de la salida. Yo iba muy tenso por la brutal caída del año pasado, así que no hice esfuerzos por conservar mi posición en el paquete. Iba junto a Alfonso pero con miedo por los continuos frenazos, así que baje un punto y me descolgué del grupo para ser engullido por el siguiente, que iba también a un buen ritmo pero con menos nervios. Antes de llegar a Jaca una nueva montonera y se me volvieron a poner los pelos de punta, así en un suspiro nos pusimos en la fatídica bajada de Jaca, donde al pasar por el punto de la caída aguante la respiración y de nuevo la carne se me puso de gallina. A partir de ese momento me sentí un poco mas tranquilo pero en el primer repechon a un ciclista se le salio la cadena al cambiar y nueva montonera. ¡Uff me he vuelto a librar!. Así continuamos hasta el túnel de Canfranc donde había una montonera con heridos de consideración y esperando a las ambulancias. Otra vez la carne de gallina, pero tranquilo pense a partir de aquí el peligro se reduce porque cada uno coge su ritmo y también porque la carretera empieza a empinarse hacia arriba.
Corono Somport con ritmo aceptable pero las pulsaciones muy elevadas cosa que me preocupa, por como me afectara en los próximos puertos. En una de las curvas rápidas al final de bajada una nueva caída delante. Ya había varios ciclistas caídos y el que precedía nuestro grupo se debió despistar y también se fue al suelo, obligándonos a hacer acrobacias al resto para no caernos.
A muy buen ritmo , comiendo y bebiendo para no deshidratarme afrontamos la llegada a Escot, donde empieza el Marie Blanque. Una vez pasado el pueblo y antes de afrontar las duras rampas de este puerto me pare para desbeber y así subir como mínimo con la vejiga mas relajada.
La verdad es que se me hizo muy duro sobre todo por el fuerte calor acompañado de bochorno que te iba mermando las fuerzas, pero no me importaba el tiempo en que coronara, este año conseguir un buen tiempo no era el objetivo, lo que quería era poder acabar sin percances.
Después de avituallarme en la bajada del Marie Blanque, espere a ver un grupo suficientemente compacto para empezar a bajar con ellos y no gastar fuerzas hasta el pie del Portalet donde comencé a subir en un grupo muy numeroso, que poco a poco se fue desmembrando, y es que el ritmo, el aire caliente de cara y el sol implacable iba haciendo mella.
Antes de llegar al avituallamiento del pantano del Portalet, paré en uno de los numerosos riachuelos que había a llenar los bidones y meter la cabeza y los pies en el agua fresca para evitar sufrir un golpe de calor ya que había muchos sitios que el asfalto se derretía debido a los 35º que había en ese momento. En el avituallamiento volví a parar para comer y beber de nuevo y retome rápidamente el ritmo para tratar de no pensar demasiado en lo que faltaba. Los últimos kilómetros del Portalet este año han sido como una verdadera etapa del Tour, donde los aficionados de todos los lugares solo dejaban un pasillo para los ciclistas, animándote, ofreciéndote bebida y jaleándote como si fueras un profesional que se esta jugando la general del Tour. Desde luego que el ambiente en este punto este año ha sido insuperable.
El resto del trayecto no ha tenido nada de particular, como siempre meterte en un grupo para bajar, subir delante y echar el resto para perder lo mínimo en Hoz de Jaca y no descolgarte en la bajada para permanecer en un grupo lo suficientemente compacto para mantener una buena velocidad con el mínimo desgaste posible.
Al final llegue a Sabiñanigo en un tiempo más que aceptable teniendo en cuenta la escasa preparación que llevaba. Han sido 205 km. en 7:12:42 horas a una velocidad media de 28.43 km/h . La posición en la general ha sido el 1331 de 8067 y de la categoría el 164 de 1851.
Una vez acabada la marcha, nos fuimos reencontrado todos en la carpa, donde comimos y bebimos y nos explicamos todas las anécdotas acontecidas y dando gracias que este año hemos acabado todos sanos y salvos.
El calor iba en aumento por momentos y se empezaba a adivinar cual seria el factor determinante el sábado, el intensísimo calor.
Sábado! Llegó el momento. Nada mas asomarme a la ventana note que la temperatura era elevada para la hora que era, ósea que el sol nos iba a machacar, pero no me iba ha impedir cumplir el objetivo de completar mi 18ª participación en la Quebrantahuesos
Este año el Club Ciclista Routier estuvo presente con una participación menor que el año anterior pero no por ello dejo de estar bien representado. En la salida cada uno se puso en su cajón. Paco con el dorsal rosa, Alfonso y yo con el dorsal naranja, Guille y Joan con el dorsal verde y Kim y Oscar con el dorsal blanco.Pistoletazo de salida y a partir de aquí empieza el peligro y la tensión, primera caída a los 150 metros de la salida. Yo iba muy tenso por la brutal caída del año pasado, así que no hice esfuerzos por conservar mi posición en el paquete. Iba junto a Alfonso pero con miedo por los continuos frenazos, así que baje un punto y me descolgué del grupo para ser engullido por el siguiente, que iba también a un buen ritmo pero con menos nervios. Antes de llegar a Jaca una nueva montonera y se me volvieron a poner los pelos de punta, así en un suspiro nos pusimos en la fatídica bajada de Jaca, donde al pasar por el punto de la caída aguante la respiración y de nuevo la carne se me puso de gallina. A partir de ese momento me sentí un poco mas tranquilo pero en el primer repechon a un ciclista se le salio la cadena al cambiar y nueva montonera. ¡Uff me he vuelto a librar!. Así continuamos hasta el túnel de Canfranc donde había una montonera con heridos de consideración y esperando a las ambulancias. Otra vez la carne de gallina, pero tranquilo pense a partir de aquí el peligro se reduce porque cada uno coge su ritmo y también porque la carretera empieza a empinarse hacia arriba.
Corono Somport con ritmo aceptable pero las pulsaciones muy elevadas cosa que me preocupa, por como me afectara en los próximos puertos. En una de las curvas rápidas al final de bajada una nueva caída delante. Ya había varios ciclistas caídos y el que precedía nuestro grupo se debió despistar y también se fue al suelo, obligándonos a hacer acrobacias al resto para no caernos.
A muy buen ritmo , comiendo y bebiendo para no deshidratarme afrontamos la llegada a Escot, donde empieza el Marie Blanque. Una vez pasado el pueblo y antes de afrontar las duras rampas de este puerto me pare para desbeber y así subir como mínimo con la vejiga mas relajada.
La verdad es que se me hizo muy duro sobre todo por el fuerte calor acompañado de bochorno que te iba mermando las fuerzas, pero no me importaba el tiempo en que coronara, este año conseguir un buen tiempo no era el objetivo, lo que quería era poder acabar sin percances.
Después de avituallarme en la bajada del Marie Blanque, espere a ver un grupo suficientemente compacto para empezar a bajar con ellos y no gastar fuerzas hasta el pie del Portalet donde comencé a subir en un grupo muy numeroso, que poco a poco se fue desmembrando, y es que el ritmo, el aire caliente de cara y el sol implacable iba haciendo mella.
Antes de llegar al avituallamiento del pantano del Portalet, paré en uno de los numerosos riachuelos que había a llenar los bidones y meter la cabeza y los pies en el agua fresca para evitar sufrir un golpe de calor ya que había muchos sitios que el asfalto se derretía debido a los 35º que había en ese momento. En el avituallamiento volví a parar para comer y beber de nuevo y retome rápidamente el ritmo para tratar de no pensar demasiado en lo que faltaba. Los últimos kilómetros del Portalet este año han sido como una verdadera etapa del Tour, donde los aficionados de todos los lugares solo dejaban un pasillo para los ciclistas, animándote, ofreciéndote bebida y jaleándote como si fueras un profesional que se esta jugando la general del Tour. Desde luego que el ambiente en este punto este año ha sido insuperable.
El resto del trayecto no ha tenido nada de particular, como siempre meterte en un grupo para bajar, subir delante y echar el resto para perder lo mínimo en Hoz de Jaca y no descolgarte en la bajada para permanecer en un grupo lo suficientemente compacto para mantener una buena velocidad con el mínimo desgaste posible.
Al final llegue a Sabiñanigo en un tiempo más que aceptable teniendo en cuenta la escasa preparación que llevaba. Han sido 205 km. en 7:12:42 horas a una velocidad media de 28.43 km/h . La posición en la general ha sido el 1331 de 8067 y de la categoría el 164 de 1851.
Una vez acabada la marcha, nos fuimos reencontrado todos en la carpa, donde comimos y bebimos y nos explicamos todas las anécdotas acontecidas y dando gracias que este año hemos acabado todos sanos y salvos.
5 comentarios:
Pues menos mal que este año no ibas bien preparado... llegas a irlo y ganas!jeje. Al final no lo hiciste nada más y como tu dices llegasteis sanos y salvos que es lo que importa! Genial tu crónica de primera mano (la mía es imposible que contenga esos detalles, así que he redireccionado a mis lectores a tu blog!). Me encantan esas expresiones tan tuyas "desbeber" "avituallarme".
Ale a seguir entrenandose que el año que viene hay que participar en unas cuantas marchas mas....
besitos,
Ana
Enhorabuena Javier. Yo sigo flipando con vosotros, una media por encima de 28, de coña. Por cieto me parece que ayer nos cruzamos por la carretera de Argentona. Lo de siempre, aquí no entrena nadie, ja,ja.
yo ya no entreno
kimet
Hola Javier. Yo he ido a Punt Terapeutic. c/ Josep Maria de Segarra 15 - bajos 5. Premià de Dalt. Pide hora en el 937548222. La fisio es guapa y e llama Eva, pero no te confies te va a doler, je je je
papa, si le echas un vistazo a mi blog verás la genial animación de turismo sostenible de la k t hablabamos ayer! es genial!
ta luec!
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